Este lugar ofrece una buena variedad de platillos, desde el tradicional pozole, el mole poblano, los sopes, burritos, enchiladas, taquitos dorados y tostadas hasta el alambre o las carnes asadas. Todo a nuestro gusto, tiene un muy buen sazón, aunque eso sí, los precios podrían ser un poco más bajos pero, la verdad, no nos quejamos.
El lugar es muy cómodo para disfrutar de una buena platiquita y un agradable momento con la familia pues el espacio es muy hogareño a nuestro parecer.
Para finalizar, te sugerimos que dejes un espacio para probar alguno de los deliciosos postres que “El Patito” te ofrece pues, definitivamente NO te puedes ir sin probar una elección del menú de postres. Hay flan napolitano, pay de queso con fresas, pay de limón, pastel de kalhúa de tres leches, helado y crepas de fresa o nutella. Nuestra recomendación son las crepas de nutella, te dejarán con un muy buen sabor de boca y muy, pero muy satisfecho.
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